Receta para escribir sin faltas de ortografía:
En primer lugar, el "paciente" debe querer curarse de su dolencia. En segundo lugar, debe identificar y reconocer los síntomas de su padecimiento: qué signos de puntuación no usa adecuadamente, qué palabras no acentúa o con qué letras comete equivocaciones. En tercer lugar, dependiendo de la gravedad de estos síntomas, el "enfermo" establecerá un horario semanal de estudio y práctica de las reglas ortográficas que podrá oscilar entre los 30 y los 60 minutos; siempre el mismo día de la semana a la misma hora. Durante ese tiempo puede usar cualquiera de las dos páginas web que se indican más abajo: leer las normas y realizar los ejercicios de autoevaluación que se proponen. Por último, el "aquejado" podrá consultar en el aula, a su profesor o profesora, todas las dudas que no haya podido resolver por sí mismo.
Esta medicina es inafalible; pero recuerde, sólo sanará de sus males quien lo desee y siga estas instrucciones al pie de la letra.
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